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Struggling Man:Virtual Family


4.2 ( 2432 ratings )
Juegos Estrategia Familiar Entretenimiento
Desarrollador Farrakh Khalil
Libre

Érase una vez, en un humilde pueblo ubicado entre colinas, vivía un hombre llamado Jacob. Era un alma trabajadora, dedicada a mantener a su amada familia. La historia de Jacob comenzó con una escena: una mujer embarazada y su esposa, aferrándose tiernamente a la esperanza mientras anticipaban la llegada del nuevo miembro de la familia.

El juego comenzó con urgencia cuando Jacob se apresuró a llamar a la ambulancia, con los nervios tensos mientras guiaba a los servicios de emergencia hacia su esposa. El primer nivel fue un torbellino de emociones y tensión, con la sirena sonando toda la noche mientras el corazón de Jacob se aceleraba con anticipación.

En el segundo nivel, los jugadores asumieron el control de Jacob, dirigiendo la ambulancia por calles sinuosas hacia el hospital. Los caminos eran traicioneros, pero Jacob los recorrió con determinación, deseando que el vehículo se moviera más rápido, cada segundo crucial para la seguridad de su esposa y su hijo por nacer.

El tercer nivel se desarrolló con el llanto alegre de un bebé resonando por los pasillos del hospital. El corazón de Jacob se llenó de abrumadora felicidad y alivio cuando abrazó a su hijo por primera vez. Su familia estaba completa y pronto regresaron a casa, con su pequeño bulto de alegría acurrucado a salvo en sus brazos.

El tiempo pasó volando y cinco años después, el niño, ahora un niño enérgico y curioso, se acercó a Jacob con ojos brillantes y una petición ferviente: una bicicleta. Era un deseo simple, pero Jacob conocía el peso de su significado para su hijo. Sin embargo, la vida había sido inflexible y las limitaciones financieras se cernían sobre su hogar.

Sin dejarse intimidar por la adversidad, Jacob tomó turnos adicionales en el trabajo, sacrificando el sueño y el descanso para ahorrar cada centavo. A partir de entonces, cada nivel representó el compromiso inquebrantable de Jacob, su rostro cansado pero decidido iluminado por las farolas mientras trabajaba incansablemente, impulsado por el deseo inocente de su hijo.

Finalmente, después de superar innumerables obstáculos y sacrificios, Jacob se paró orgulloso ante su hijo, con una bicicleta brillante a su lado. La pura alegría en el rostro de su hijo valió cada lucha que Jacob había enfrentado. No era sólo una bicicleta; fue un testimonio del amor incondicional y la dedicación inquebrantable de un padre.

El juego concluyó con una escena conmovedora: un padre y un hijo pedaleando juntos, el viento llevando sus risas mientras se embarcaban en un viaje lleno de amor, perseverancia y el vínculo inquebrantable de la familia.